jueves, 26 de septiembre de 2019




VERSOS EN PENUMBRA

En esta penumbra de tarde


La nostalgia me acompaña


Fiel costumbre su cizaña


Forma parte de su alarde



Que falta me haces amiga


Sin tu amor no puedo existir


Me traes recuerdos de vida


Siempre deleitan mi sentir




Rayos del sol en la lejanía


Generan trazos de oscuros


Los verdes pierden su alegría


  La noche acerca tiempos crudos




Rastros violetas me muestran


 Firmamentos con amargos


Horizontes valientes cuentan


Llegada de noches y letargos




La luna se despidió en menguante


Las estrellas reemplazan su fulgor


Orión y su estela brillando valor


Venus y Júpiter en abrazo de amantes




La noche transcurre en ensueño


Padre Dios ilumina el amanecer


Agradeceres mayores al dueño


por bendita existencia dada al nacer









Verso dedicado a la nostalgia que nos genera un atardecer sin luz eléctrica, como los tantos que hemos sentido en Venezuela. ¡La vida nos regala constantemente muchas posibilidades! Nos abre muchos caminos y senderos. Algunos decidimos tomarlos y otros no…
Inspirado y escrito por: Juan Raul Alamo Lima. Caracas - Venezuela. | Categoría: Verso
Blog: juanraulalamo.blogspot.com
Instagram: @juanraulalamo_literario  y @juanraulalamo  
Twitter: @juanraulalamo
Facebook Juan Raul Alamo
26 de septiembre de 2019

martes, 24 de septiembre de 2019



MI EXPERIENCIA LITERARIA

 ¡La vida nos regala constantemente muchas posibilidades! Nos abre muchos caminos y senderos. Algunos decidimos tomarlos y otros no.  Desde niños apreciamos y actuamos sobre la base de lo que nos gusta y lo que no nos divierte. —La sabiduría natural— que generó la frase más conocida del mundo, nos manifiesta que el hombre antes de regresarse al infinito debe haber logrado tres obligatorias tareas durante su existencia, las de:

    —¡Sembrad un árbol, tened un hijo y escribid un libro!

 A veces no le encontramos significado, ni importancia, ni sentido a estas labores irrenunciables. — ¿será verdad que debemos cumplir con estas tareas? — Sin remedio, la sabiduría  y las canas con el paso de los años nos muestran el verdadero sentido de ello.

 El “Arbol” para dejar una mejor naturaleza de la que encontraste al llegar. El “Hijo” para sembrar tu huella hereditaria digna, regalarte el amor mas puro y sincero que jamás hayas sentido y lo llenes de valores ejemplares y el “Libro” para que tu “legado filosófico” y tus pensamientos no se extingan con el paso de las décadas y los siglos,  puedan ser leídas por tus generaciones y se plasmen en la cultura popular en el futuro.

 Muchas veces somos educados desde la infancia para las ciencias. En bachillerato te ponen a decidir por “las Ciencias o las Humanidades”, como si ellas fueran: “enemigas acérrimas  de duelo a muerte con cuchillo en boca” y ello nunca nos permitió amar a los verbos, acentos, adjetivos, pronombres, adverbios que nos complicaban la vida de nuestra mente lógica, analítica, geométrica, trigonométrica, aritmética y matemática y así las normas de acentuación de las agudas,  llanas y  esdrújulas pasaron a ser nuestras peores amigas.

 Dios te premia con bellas sorpresas donde te ocurren situaciones que le dan un giro a tu mente y te permiten reconvertirte en lo que nunca imaginaste y creíste imposible. Siempre hay la posibilidad de abrir nuevas ventanas de la vida para descubrir nuevas fortalezas, y hacer uso de tus canas y tu paciencia, para darte lecciones de Literatura, de nuevos retos, de creatividad, de entendimiento y de autoconocimiento. Todo ello te trae siempre nuevas experiencias, sorpresas, te abre nuevos horizontes, te hace conocer tu yo en profundidad y te permite mostrarle a tu prójimo nuevas facetas mágicas de tu “escondida” personalidad.

 A pesar de haber sido educado para las ciencias, siempre estuve muy cercano a la literatura mediante la lectura de algunos “best-sellers”, libros de autores clásicos de genios muy importantes y creación de modestos versos dedicados a la mujer que amo, pero nunca tuve la decisión de hacer escritos propios que me permitieran mostrar vivencias, relatos, cuentos o disertaciones sobre diversas facetas de mis aventuras y experiencias generadas durante el paso por mis años. Quizás un momento de soledad en mi vida y la sugerencia motivadora de mi hija mayor, me impulsó a decidir a escribir sobre diversos temas que fueran interesantes mostrar a mis críticos y exigentes lectores potenciales.

  Para ello ¡sin incertidumbre ni titubeo!, como buen científico y mitológico “Ingeniero Literario” estudié y adapte a mi mente la siguiente metodología, que hasta este momento ha generado productivamente 16 escritos cortos en menos de 90 días, que me han llenado de satisfacción por las muchas sinceras críticas positivas y las no pocas sugerencias de mejoras, que me han llenado de buenas experiencias para corregir, perfeccionar y darle un toque de locura de “pincelada artística” a mis “papiros egipcios” cada día más:

 .- primero: debemos inspirarnos para elegir correctamente los temas sobre lo que hemos decidido escribir, lo cual definitivamente no es fácil, pues tenemos que intentar mostrar facetas interesantes de nuestras experiencias reales o imaginarias que entretengan, “enganchen” y no aburran al lector. Debemos ser humildes y evitar que nos tilden de Intelectual pues como dice Federico Vegas: —“Nada une mas a una familia que un hijo poeta, todos se unen en su contra”…

 .- segundo: tenemos que plantearnos entender quien conforma nuestro escenario. Por supuesto nuestras primeras “victimas” son nuestros familiares y amigos cercanos que se asombran y no terminan de creer la aparición de nuestra nueva faceta, hasta que se observe que existe cierta seriedad, calidad y entretenimiento en los géneros literarios mostrados.

 .- tercero: hay que decidir, estudiar y entender los diversos “Géneros Literarios” que quieres experimentar. Hay Novelas, Novelletes, Novellas, Cuentos, Microcuentos, Relatos, Mitos, Leyendas, Poemas, Epopeyas, Disertaciones, Vivencias… Por supuesto se debe estudiar las diferencias entre ellas en cuanto a su contenido, su extensión y su prosa. Cada género literario formalmente es un sistema que permite la clasificación de las obras de acuerdo con criterios semánticos, sintácticos, fonológicos, discursivos, formales, contextuales, situacionales y afines.

 .- cuarto: localiza rápidamente y enamórate de tu musa y  permite que te adopte tu mentor. ¡Sin ellos no eres nadie! Hasta el mayor de los artistas universales amó a su musa que lo inspiró a desarrollar su fantasía y respetó a su maestro que le mostró y corrigió la técnica literaria, eso sí, fundamentado en que le sucedió al genio del pincel Pablo Picasso:.

   “Cuando llegue la inspiración que me encuentre trabajando”

 .- quinto: ¡hay que ponernos a escribir! La literatura es como el deporte. ¡Si no sudamos no mejoramos! Y definitivamente ¡No ganamos músculo literario! Si nos caemos pues nos paramos y seguimos… Nadie puede hacer un maratón sin haber “pateado el asfalto” durante 18 semanas, bajo un aprendizaje teórico y práctico con una gran metodología y apoyado por un buen “coach” que dirija tus pasos y que nos permita descubrir lo que  decía el gran Ernest Hemingway: "El primer borrador de cualquier cosa es una... MIERDA"

 .- sexto: irremediablemente proceder y lograr llegar al “meollo del asunto” para definir la estructura de tu escrito que debe incluir: un “Principio-introducción” o “plateamiento”; su parte media o “nudo”; y la parte final o “desenlace”, en un tiempo definido. El “desenlace” es esencial, entre otras cosas, porque si le ha gustado al lector, buscará más relatos tuyos para leer. La idea es:

¡Mantener la atención de tu publico sin que llegue a vislumbrase un final!

 .- séptimo: escríbelo en un tiempo razonable. —“más vale paso que dure que trote que canse”. De tratarse de relatos, vivencias y cuentos cortos los mismos no deben tardar más de una semana, ¡dos como mucho!, incluyendo la fase de revisión y corrección.

 .- octavo: a comprar la —¡tijera de jardinero! y a podar tú escrito con ella. No temas ser implacable con lo que sobra o incomoda en tu creación. Debemos leer el escrito varias veces en voz alta, pues las cacofonías o las repeticiones se detectan mejor.

 .- noveno: una vez listo tu escrito pues la idea es “limosnear elogios”, lograr ¡Que hablen bien o mal, pero que hablen…! publicarlo y para ello existen diferentes medios como: tu blog dedicado a literatura, enviarlo por “Whastapp”  a Grupos o a Difusión, mercadearlo en base a tus expectativas y tu “target” por Instagram , Facebook y Amazon y en el mejor de los casos enviarlo a concursos literarios para competir con otros escritores.

 .- décimo: aprender de la experiencia vivida, —¡Afilar tu hacha! seguir perfeccionándote en las múltiples variables para mejorar cada día más tu estilo literario y seguir leyendo a grandes cuentistas que te enseñen sus estilos, creatividades y personalidades para que te permitan enriquecer las características de tu yo creador.

 Muchas veces me he preguntado:

 ¿Cómo se habrán sentido en el siglo XVI los genios universales Miguel de Cervantes Saavedra creador del “El Ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha”  o Williams Shakespeare y su “Romeo y Julieta” o su “Hamlet” en las noches, al crear sus bellos y creativos escritos con su pluma de cisne y su frasco tintero, solo con alguna vela o antorcha encendida, con los claros oscuros que los acompañaban y les llenaban de penumbras?

   —¡Qué nostalgia pensé! y exclamé: —¡Esto es lo que me encanta de esta pasión! y remangué la manga de mi pijama y vi cómo se me habían erizado los pelitos del antebrazo.

  Y observo que por cosas del destino, cinco siglos después, este “novato escribidor” logró crear esta “vivencia” donde plasmé 1.490 palabras —“gracias a Word”, en una sola sentada de tres horas creé el borrador inicial y donde por cosas del destino me acompañó la misma circunstancia de una noche oscura sin luz eléctrica, —con un cirio de funeraria encendido y  un horizonte relampagueante lleno de truenos, que me trasportó a pasados románticos e inspiradores nunca imaginados… eso sí y me dije a mi mismo:

    ¡Este escritor si escribe!— y luego añadí para darme importancia:

    ¡gracias a Dios que mi laptop tiene batería!...




Escrito por: Juan Raul Alamo Lima. Caracas - Venezuela. | Categoría: Vivencia
Blog: juanraulalamo.blogspot.com
Instagram: @juanraulalamo_literario  y @juanraulalamo  
Twitter: @juanraulalamo
Facebook Juan Raul Alamo
24 de septiembre de 2019

viernes, 20 de septiembre de 2019


ENTRE DOS MUNDOS

 La vida a veces nos trae ruido, nos enreda y entumece el pensamiento y hasta nos puede generar confusiones. ¡la existencia en determinados momentos nos pone a dudar! Una de las razones para que ello ocurra lo genera la llamada <<Diáspora>> que nos entrega con mucha rudeza desde hace ya varios años un gran dilema que a veces nos trae la pregunta incontestable de si: 

 — ¿Se es de aquí o se es de allá?…

 La <<Diáspora>> se define y lamentablemente  implica, la dispersión de grupos étnicos o religiosos que han abandonado su lugar de procedencia originaria y se encuentran repartidos por el mundo.

 ¿La <<Diáspora>> nos debe trastocar?, ¿nos debe desestabilizar emocionalmente?, ¿nos tiene que necesariamente desequilibrar y quitarnos nuestra felicidad? Estas son otras preguntas que debemos contestar, pues no es fácil no sentirse emocionalmente golpeado por la separación física con nuestros seres queridos y nuestros “juguetes”.

 ¿Quién en los actuales momentos no tiene un hijo, un nieto, un hermano, un sobrino, un familiar cercano o lejano en algún país del mundo? ¿a cuál ser humano de buena voluntad no se le ha arrugado su corazón al ver a su familia caminar por los pisos cromáticos de Carlos Cruz Diez? Nuestros hijos y nietos dejaron de oír el “Gloria al bravo pueblo” y  el “Alma Llanera” y de repente empezaron “los tíos” a escuchar petardos en las “Fallas Valencianas”, o a desfilar en “las fiestas patrias Chilenas” y hasta festejar el día de “Saint Patricks en Irlanda” —Son muchas las preguntas y muchas las afirmaciones que nos parten el pecho y nos desconsuelan de la desunión involuntaria a la que hemos llegado, como consecuencia de la situación país a la que nos hemos enfrentado durante tantos años en nuestra querida patria.

 ¡Nadie se salva de tener su propia historia de emigración! ¿Quién  quiere tomarse un brebaje desconocido? Cuando navegamos el océano Atlántico en el “Anna C” en los años 60`s, las cartas para nuestros familiares tardaban dos meses en llegar por barco a su destino y las telecomunicaciones eran prácticamente inexistentes. —Muchos nacieron en el ¡norte de la América del sur!  y otros llegamos de otros confines de la tierra hace muchos años, cuando los volcanes que nos dieron la luz, nos obligaron por diferentes motivos a llorar nuestra partida por razones políticas, económicas, sequías y hasta en algunos casos por racismo, dejando atrás a nuestros abuelos, tíos, primos, hermanos, amigos y algunos de mayor edad se separaron de sus esposas, novias y hasta de sus bellezas naturales que tanto atraen a el espíritu.  —Hace muchos años atrás al llegar a esta patria recibimos una Venezuela hermosa, grande, vibrante, amable, llena de progreso, relativa estabilidad política y bellezas naturales de cómo dice la canción:  “desierto, arena, nieve y volcán”. Aprendimos a amarla, a ser amables con ella y querer a sus ciudadanos que se volvieron nuestros amigos.

 Aquí en nuestro país adoptivo, heredamos su cultura graciosa y amable, jugamos de niños: —perinola, trompo, garrufio, papagayo y carrucha. Estudiamos para forjarnos un bello futuro; creamos nuestras ideas y las emprendimos para “darle una mano” y un “granito de arena” con nuestro trabajo y así generar valor agregado al empleo y a la riqueza del país.

 Aquí nos enamoramos por primera vez y besamos con pasión a nuestra novia. —En Venezuela nos comprometimos con el amor de nuestra vida y Dios nos permitió traer al mundo a nuestros hijos que a su vez procrearon a los bellos nietos, sin nunca imaginarnos que en algún momento el destino nos separaría nuevamente físicamente, más no en nuestros sentimientos. ¡Aquí en Venezuela mis padres y pocos buenos amigos ya descansan en paz!

 Recientemente nos ha tocado vivir nuevamente esta desunión forzada. ¡La historia tiende siempre a repetirse! Nuestro nido forjado con trabajo, cariño y amor se nos volvió solitario y fue en ese momento que vimos el tamaño del “nido vacío” que nos tatuó  la separación de nuestros seres queridos.

 ¡Hay muchas razones nuevas para forzar la emigración! La falta de oportunidades, paciencia y de crecimiento para los jóvenes solos o en pareja, muchos de ellos profesionales universitarios con ganas de tener calidad de vida que los llevó a ello y actúo como el impulso principal, a pesar de que sabía que se sacrificaría la unión familiar cercana. —Pero pensando en la futura generación,  y en una vida con balance, siempre habrá un costo cuando se paga por tener algo nuevo, pues solo se tiene dos manos y a veces tenemos que liberarlas para poder agarrar otro destino. —“La decisión se toma más en base a lo que se va a conseguir que en lo que se deja”, pues de otra forma no se tomaría. Ya una vez que el paso esta dado, ¡no hay mucho sentido en mirar atrás!, no se puede estar viendo constantemente por “el espejo retrovisor de un carro”, sino mirar hacia adelante para conducir correctamente por la vía nueva, y no pisar huecos y esquivar  obstáculos del camino que se debe emprender.

 Una vez tomada la decisión, pues se llega a la aventura y sin mayores expectativas. “La bendición es la No expectativa”, pues el universo te apoya y te trae constantemente bendiciones, más allá de las personas y cosas que se dejaron de tener al llegar al  nuevo destino.  Al darnos cuenta se descubre que no hay “separación” de nuestros padres y hermanos, sino que simplemente se está físicamente en lugares distintos, pero que gracias a la tecnología, no hay espacio, ni hay un hueco, un puente, un vacio, ni un abismo. ¡No lo hay! No se sabe si es una manera de negación o de aceptación ¡No hay retruque!. —Funciona para no deprimirse, sentirse mal y agradecer por lo que la nueva  vida ha brindado, sea la que sea que la vida anterior haya quitado.

  ¡La verdad es que no se dejó a Venezuela! pues  ¡eso está allá!, todas las experiencias están en el ser interior. Todo el país está dentro de la persona, aunque yo no se pueda visitar en los actuales momentos. La vida cambia, ¡todo es un cambio!, se tiene que ir evolucionando y  fluyendo con la vida y hubo un momento en que la señal decía ¡por aquí no es! Se deja de sentir la alegría, la abundancia, la fluidez y de esa manera la vida te va direccionando a donde sí es. —La energía de la Ley de la Atracción es importante, y se tiene que dejar  fluir con lo que la nueva vida va presentando, pues cuando se bloquea por no dejar lo que se tiene, no se van a poder vivir las nuevas experiencias.

  Mucha gente vivió en su país toda la vida, ¡no hubo razones para emigrar en un país próspero!, no sabemos si es bueno o malo mudarse de país. La misma Venezuela expulsó a muchos de sus habitantes, los puso al borde del abismo, y los dejó caer sin remedio y había que desplegar “las alas” y ver que si podía volar, y se descubrió que se siente bien,  que no hubo caída y se agradeció por todo lo que ha venido. En algunas experiencias irse del país obviamente no es fácil y más si se tenía una vida de relativas comodidades. Pero también a veces se emigra para cambiar las comodidades por la tranquilidad. Se coloca en una balanza una vida con estrés, preocupaciones, inseguridad; contra una vida con un poco más de trabajo, pero totalmente amable  y con poca o cero tensión por la inseguridad del nuevo país.

  Se llega primeramente a regularizar “papeles” sin saber exactamente qué hacer, donde te suministran poca información y por más que se te expliquen algunas cosas, ¡todo se vuelve una mezcolanza!, las autoridades dan por hecho que ya se conocen todos los procesos, palabras y organizaciones gubernamentales, por lo cual cuesta más aun entender que es lo que se debe hacer, para poder tener los documentos en orden y dejar de pertenecer a un “insustancial limbo”.

 En el mejor de los casos emigras con tu orgullosoTítulo Universitario de Venezuela” y es muy probable que tengas que trabajar para generar ingresos para tu familia en trabajos que no tienen nada que ver con tu carrera estudiada. A veces son ocupaciones que no existen en tu país o que los denominan de una manera totalmente diferente. Una vez que ya consigues tus documentos y  trabajo !Se tiene una vida con más rumbo! Se empieza a entender que las leyes del trabajo no son como en tu país natal y que pueden prescindir de ti en cualquier momento. Por otro lado, cuando ya tienes trabajo y te has esmerado en “mendigar elogios” puedes lograr que se otorgue por la buena labor un contrato fijo.

 Con el tiempo y tu esfuerzo normalmente tienes una mejor estabilidad que cuando llegaste, pero siempre se seguirá pensando en tu país!  Se ha cambiado la vida, la que se conoce de siempre. !las rutinas! ¡Los lugares! ¡El hogar! para hacer un nuevo hogar, unas nuevas formas de vida y aun luego de varios años da nostalgia saber que se tuvo que emigrar de tu país por un mejor futuro para los hijos. —Pero se tuvo que cambiar todo y empezar con muy poco para poder darle una existencia mejor a los hijos que están comenzando en su trayecto por la vida. Siempre  acompaña un sentimiento extraño de ¡vivir en un lugar como que no fuera tuyo! No se termina acostumbrar la mente, todo está perfecto, con todo alrededor en el mejor momento que podrías pedir, pero sigue esa sensación de todo lo que dejaste atrás, algo difícil de explicar pero que te  hace extrañar lo que tenías y tuviste que dejar por culpa de una sola persona y un erróneo sistema de gobierno  que arruinó un montón de vidas.

 Hay muchas experiencias buenas y malas, algunas se quedaron atadas al pasado, al odio a la expulsión y los sueños con pesadillas. Lo que más puede costar es el “encogimiento” del alma, la  nostalgia, la tristeza, la melancolía, “la morriña” (diría un gallego), pero no debe permitir paralizar. —Hay que seguir adelante.  Un click en “Internet, video llamadas, whastapp, facetime” y se oyen o ven a todos los familiares. ¡Ya se abrazarán y besarán cuando el futuro lo permita!, inclusive en algunos casos se ha logrado mas cercanía con algunos miembros de la familia gracias a todo esto. ¡Se llega hasta creer que se es capaz de detener el tiempo hablando en cámara lenta!

 Pero como: “después de la tormenta, viene la calma” y que “No hay mal que por bien no venga”, las otras latitudes del Planeta Tierra nos están enriqueciendo a nuestros seres queridos, “sin incertidumbres y titubeos”, con conocimientos, culturas,  historias, reconocimientos, trabajo y riqueza. —Les entregamos una Gran “mochila viajera” con  un “Combo” lleno de títulos, conocimiento, valores, buenas costumbres, sagacidad, trabajo, largoplacismo, picardía sana, sabor tropical y no permitimos que viajaran con  malas costumbres  y pecados de algunos seres de nuestro país,  que lo llevaron a la situación por la que estamos pasando, como lo son los siete pecados que comprenden: la viveza, piratería, cortoplacismo, amiguismo, impuntualidad, habladera y flojera.  

 Lo bueno de todo esto es que cada quien ha ganado una gran experiencia de vida, ha tenido que entender, mimetizarse y hacerse entender en una nueva cultura sin olvidar las solidas raíces, pues “El hombre propone y Dios dispone”  


     !al final todos somos del planeta tierra! y no queda otra opción que seguir andando firme con la parsimonia milenaria de una esfinge egipcia…





Escrito por: Juan Raul Alamo Lima. Caracas - Venezuela. | Categoría: Disertación
Asesoras: Patricia Alamo Rodriguez – Irlanda  / Carolina Alamo Rodriguez – España / Adoración Alamo Lima - Venezuela.
Blog: juanraulalamo.blogspot.com
Instagram: @juanraulalamo 
Twitter: @juanraulalamo
Facebook Juan Raul Alamo
20 de septiembre de 2019

viernes, 13 de septiembre de 2019


DON ARMANDO Y SU PACIENCIA

 Don Armando llegó por casualidad  a nuestra casa del bosque hace 3 años de la mano de nuestra hija mayor, era el cacique de una tribu de 20 de los suyos donde había mucha promiscuidad; ¡era un conquistador!, ¡se las daba de Don Juan! Es un ser muy solitario, de paciencia y de caminos. —Siempre fue muy lento a pesar de su edad y se caracterizaba por ser un tipo duro que da pasos cortos y dirige siempre su mirada hacia el piso. Un día nos encontramos a Don Armando accidentado en un terraplén de nuestro terreno, con la mirada agobiante, las pupilas dilatadas, el pulso lento y casi a punto de desfallecer...

 El agua le limpia, le encanta y le purifica. No molesta, ni le afecta que lo molesten. Hace lo que tiene que hacer en la vida y cree en el sin importarle lo que pase a su alrededor. Tiene su casa propia, de hecho ¡el camina con su casa puesta encima! Nuestro ser interno es nuestra casa, ¡piensa el! pues vuelve a ella cada vez que lo desea sin tapujos buscando su paz.  Ahora no tiene novia ni esposa, no tiene familia, ya dejó de vivir en su tribu de los suyos, disfrutó de orgias, apareamientos, vivió todo eso, pero la vida lo llevó a ser diferente en esta etapa de su existencia.

 No le importa que sepan que es coprófago al que no le falta nunca la comida, le encanta como si fueran “brownies”. Se hace rogar y se desaparece a menudo. No sabemos cuál será su siguiente paso, su siguiente destino. ¡el solo vive y deja vivir!...

 Dicen que nació en una casa de llano, donde las corocoras blandían sus alas rojas escarlatas en una laguna del Rio Caparano, en lugares donde los bucares naranjas y los araguaneyes amarillos, “se pintaban de colores pa’ que no los conocieran”. En los lares de amaneceres multicolores donde las anacondas, las babas y los chiguires inundaban la sabana.

 Su madre vivió como 100 años, pues nació en los tiempos del dictador Juan Vicente Gómez, en los momentos cuando el magnate John Rockefeller desvalijaba el petróleo y la brea tachirense para asfaltar las calles de New York. —Cuando los estudiantes de la generación del 28, dejaban la “casa que vence las sombras”, por trabajos forzados con trajes a rayas, construyendo carreteras desnutridas por los confines de la patria. —Los ancestros de Don Armando también conocieron el inicio de nuestra democracia de la mano del autor de Doña Bárbara y la ruptura del hilo constitucional por la bota del nuevo dictador jefe de la Seguridad Nacional y logró ver otros 40 años en la democracia de los “defectos y virtudes”, que desarrolló al país a su máxima expresión, gracias al grifo abundante de la maldita renta petrolera.

 Cuando conocimos a Don Armando  (nos dicen su nombre proviene del personaje galán jefe de Betty la Fea), empezó su relación con nosotros dándonos  unas lecciones de <<paciencia>>. —Esta palabra definitivamente es una virtud, tiene que ver con “el tomarse las cosas con tiempo y con calma”.

 Es también: “La capacidad de sufrir y tolerar desgracias y adversidades o cosas molestas u ofensivas con fortaleza, sin quejarse ni rebelarse” y hay quien lo define simplemente como: “la calma o tranquilidad para esperar”. La Paciencia es un poder que gozan muchos seres en el universo que les trae grandes beneficios, sobre todo a la hora de tomar las decisiones correctas en la vida. —Lo otro es que la tienen muy pocas personas y que a veces ocurre que la perdemos, hasta tener que buscarla con linterna y detector de metales, pues es muy difícil de que regrese.

 A Don Armando le encanta la naturaleza, el siempre se encuentra caminando por  senderos verdes, subiendo cuestas,  atravesando “gamelotales”, moviéndose por rutas con hojas secas de eucaliptos, contando las hormigas y los bachacos que a veces lo acompañan.  —En su nuevo hogar ve siempre a lo lejos los pinos caribes, los chaguaramos, cactus, trinitarias, cayenas, mangos, aguacateros y  yagrumos, que con sus canas y sus perezas (tan pacientes o más que Don Armando) los hacen los dueños de la montaña . 

 El es un ser natural que nos mira con ojos sobresaltados, siempre está pendiente de su alrededor, de que no lo molesten los territorialistas del sector y que no lo incomoden los guapetones del barrio.
 Desde que llegó a nuestra casa escogió como lugar de pernocta la parte de abajo de la piscina, que es un lar lleno de tuberías, válvulas, codos,  filtros, bombas ruidosas y azulejos de repuesto, pues ahí se siente a gusto y nadie se atreve a molestarle.

 ¡Es un tipo fantástico! A veces se disfraza de Yogui Hindú, o de oso pardo de los Montes Apalaches norteamericanos y se atreve a invernar pasando muchos días sin comer ni beber nada, ¡una vez se nos perdió durante meses! y de repente estaba ahí, “vivito y coleando”.  —Su fruta preferida es la patilla, le gusta su color, su humedad y su dulzor que le calma la sed y le llena de energía.

  A pesar de su edad le gusta jugar con carritos a escala. Le traen recuerdos de bellos momentos de su infancia que le impregnan una nostalgia que le hace feliz. —En especial los Tanques de Guerra con color olivar son sus preferidos como los que usaba el General Patton en la segunda Guerra mundial, pues dice que se parecen mucho a él.

  A Don Armando ¡Una mala jugada le forjó su destino! Una pendiente muy accidentada en la vecindad, generó un desliz en su lento andar y sufrió un accidente que lo dejó virtualmente “patas arriba”. En vista de sus heridas y cansancio, no había manera de que pudiese voltearse a su posición natural. Cuando lo rescatamos, desconocíamos el tiempo que había estado en esa posición incómoda, pues ya se encontraba en un estado de alta dificultad. Lo volteamos, le dimos sus primeros auxilios, le quitamos el polvo, respiró profundamente, se dejo estabilizar, nos miro con ojos agradecidos y siguió su camino, lento, constante y paciente ¡como buen  Morrocoy que es!...


Escrito por: Juan Raul Alamo Lima. Caracas - Venezuela. | Categoría: Cuento
Asesora: Patricia Alamo Rodriguez - Irlanda
Blog: juanraulalamo.blogspot.com
Instagram: @juanraulalamo  
Twitter: @juanraulalamo
Facebook Juan Raul Alamo

13 de septiembre de 2019

viernes, 6 de septiembre de 2019



EL AVIÓN Y SU AMIGO

 Me llamo <<Vintage>>, ¡soy un avión viejo pero atrevido! Me diseñaron y construyeron con cariño y buena mano; he volado muy alto en los cielos de Dios…

 Era el año 1975, ¡estábamos en emergencia! hacía muy mal tiempo ese día, los vientos borrascosos estaban desestabilizando mi vuelo, la pista de aterrizaje no se observaba en el horizonte, los nervios “come uñas” apuntaban hacia un posible desenlace fatal. Las vibraciones lastimaban mi fuselaje, mi tren de aterrizaje esperaba el contacto con tierra para humear los cauchos friccionados. El “Mayday, mayday, mayday” había sido puesto en acción, el personaje de la torre de control no contestaba, estaba a muy baja altura sobre montañas encrespadas; todo se vislumbraba hacia un desastre total…  

 Me fabricaron con una muy buena ingeniería. Los mejores ingenieros aeronáuticos egresados del Massachusetts Institute of Technology, crearon mi diseño basado en las teorías de “Dinámica de Fluidos” que, en el siglo XVI en la ciudad de Basilea en Suiza, creara el matemático Daniel Bernoulli, que se lució descubriendo los principios fundamentales de la hidráulica, la hidrodinámica y la elasticidad que me permiten volar, en los cielos azules eternos.

 Tenía una excelente aerodinámica y una magnifica potencia en mi motor de pistón y combustión interna, que me permitía despegar en pistas muy cortas y abruptas, para que mi sustentabilidad me permitiera volar a bajas o altas velocidades, con la majestuosidad de un Cóndor sobre los grandes riscos de la Cordillera de los Andes 

 Como toda aeronave, cuento con un robusto fuselaje, una buena superficie de sustentación con mis gloriosas alas, excelentes bordes de ataque, ¡que decir de mis “spoilers, flaps y slats”!. Mi timón de buena superficie de control y mis alerones de superficies móviles me permite navegar, con un buen coeficiente de planeo y un mejor ángulo de ataque, inclusive con alabeos o cabeceos hacia donde los destinos lo permitan y eviten la Ley de la Gravedad que tantos daños ha generado a la historia de la aviación, que solo ha estado con nosotros desde hace 120 años gracias a Leonardo Da Vinci que allá en Italia en 1488 dibujó y diseñó los planos de la primera máquina voladora; y a los fabricantes de bicicletas los hermanos Wright en Norte América en 1903 a principios del siglo XX
 Soy de color anaranjado, (como la “naranja mecánica del 74”), con unas rayas negras gruesas y finas que me dan un efecto “vintage” (quizás por ello es que me bautizaron así), que muestra orgullosamente mi edad. Tengo una bella hélice de aluminio reforzado, que se conecta al potente motor marca OS modelo 703, que, alimentado con gasolina de alto octanaje, genera una excelente potencia que me lleva a los altos cielos en un ¡2 x 3!, haciéndome sentir más contento que un águila de cabeza blanca de esas que salen en banderas nacionales.  

 ¡Tengo una muy buena estirpe! pues mis predecesores, ¡los más valientes! Han logrado muchas proezas como: —Los que volaron entre 1914 y 1918 en la primera guerra mundial, cuando el piloto alemán Manfred  von Richthofen (el “Barón Rojo”) en un Fokker Dr.1 triplano, hizo desastres al derribar ochenta aeroplanos enemigos de las potencias centrales de la Triple Alianza de Alemania, y el Imperio Austrohúngaro. Qué decir del —el Spirit of St. Louis, que junto con Charles August Lindbergh  cuando atravesó por primera vez el Océano Atlántico entre Long Island y  Paris en 32 horas y 32 minutos, el 21 de mayo de 1927, demostrando que si se podía hacer grandes hazañas con los de mi tipo.Hasta en 1937 una bella y muy valiente damisela norteamericana llamada Amelia Earhart , se le puso entre “ceja y ceja” dar la vuelta al mundo en un avión y no se supo más de ella cuando su vuelo se encontraba en el vasto Océano Índico.

 Mi pedigrí también proviene de cuando veloces aviones americanos e ingleses sobrevolaron nuevamente entre 1939 y 1945 a Alemania, Italia y Japón en la segunda guerra mundial para darle el triunfo a los “aliados”, evitando así la proliferación de la locura de Adolph Hitler; y qué decir de cuando me fueron perfeccionando por tantos otros conflictos bélicos y tiempos de paz, para transportar con seguridad a tantos seres humanos por todos los confines de la tierra.

 Hasta que el 16 de julio de 1969, con tan solo 60 años de nacida la industria de la aviación y de la mano precisa del genio Neil Armstrong llegamos a la Luna, pero esta vez en forma de cohete en el Apolo 11 y su módulo lunar.

 Volviendo a la historia de la emergencia, ese día junto con mi buen piloto nos levantamos muy temprano, llegamos al aeropuerto, abastecimos de buena gasolina, revisamos la bujía, los fluidos del motor y el fuselaje. No generamos “plan de vuelo oficial”, pues despegamos de una pista clandestina, mimetizada con la naturaleza, como esas que usaron en Medellín en los tiempos de Pablo Escobar. Todo iba muy bien, hasta que en la lejanía observé unos “cumulo nimbos” muy oscuros del tamaño de un pueblo, llenos de relámpagos que los iluminaban como lámpara de acetileno en el horizonte, en algunos momentos rayos que llegaban hasta el suelo con muchas ramificaciones como los del Relámpago del Catatumbo. De repente me encontré en el espesor gris que me quitó totalmente la visibilidad, la orientación, la claridad de mis pensamientos, que dejaron de ser azules, pasaron a ser grises y desaparecieron en el acto. El norte era mismo que el sur, que el este y el oeste; solo sabía que había un destino en tierra en algún momento. Hasta ya desconocía la altitud de la nubosidad. !Pensé que era el final, gritábamos y rezábamos!

 ¡Pero yo sabía que no estaba solo!, mi gran amigo en tierra con su radio control Futaba, de 75.64 MHz de frecuencia, con su ondeante bandera blanca/verde y sus 6 canales, con sus firmes y táctiles “pulgares”, operándome desde tierra a mi acelerador con su zurdo izquierdo y mi movilidad con su diestro derecho. —Se llenó de inspiración, y aun sin lograr verme en algunos instantes supo traerme a buen destino. Con daños severos, algunas gotas de lluvia en mi fuselaje y con altas rasgaduras generadas por el frío granizo que golpeó a mi papel protector de mi ala principal.

Yo nunca perdí la fe en que era inevitable llegar, y dije: ¡al mal tiempo buena cara! Estaba claro que el padre de mi amigo le enseñó que: ¡el buen capitán se ve en la tormenta! Y que estaba en un vuelo de bello gris, bajando como roca por despeñadero, como gota de lluvia cristalina, como copo de nieve octogonal. —Y de repente, ¡la nube quedó en su verticalidad!; apareció la vida, lo conocido, la naturaleza, las cumbres, el pueblo, la costa y el mar con sus olas que me dijeron gracias por estar con nosotros.

  Mi amigo (como todos los grandes amigos) resolvió mi destino, y yo sabía que de su mano lograría mi salvación.  —Yo no era como “El pájaro que estaba en una jaula que no sabía lo que significaba la libertad”.  

 Nunca nos dimos por vencido en la “búsqueda de mi retorno”, me abrace a mis creencias y mis ilusiones… —¡hicimos nuestro propio milagro! Eso siaunque con los cauchos pinchados


Escrito por: Juan Raul Alamo Lima. Caracas - Venezuela. | Categoría: Cuento
Blog: juanraulalamo.blogspot.com
Instagram: @juanraulalamo  
Twitter: @juanraulalamo
Facebook Juan Raul Alamo
06 de septiembre de 2019